Air Liquide anunció la exitosa puesta en marcha de la primera unidad piloto de craqueo de amoníaco a escala industrial del mundo. con capacidad para convertir 30 toneladas de amoniaco en hidrógeno al día en el puerto de Amberes-Brujas. Bélgica

Esta innovadora innovación, anunciada el 13 de noviembre, representa un elemento tecnológico clave que falta en el posible camino hacia la conversión de amoníaco en hidrógeno. y desbloquear desafíos en el transporte de hidrógeno. Esta tecnología ha sido probada industrialmente para el desarrollo de plantas globales de craqueo de amoníaco. Proporciona acceso a hidrógeno renovable y con bajas emisiones de carbono. Reducir las emisiones industriales de carbono y la movilidad

La capacidad de transportar hidrógeno de manera eficiente a largas distancias es un desafío constante en el desarrollo de una economía global del hidrógeno fuerte. Amoníaco (NH3) formado a partir de moléculas de hidrógeno y nitrógeno. se convierte en un valioso portador de hidrógeno. Puede producirse de forma rentable en regiones con fuentes de energía renovables como la solar, hidráulica y eólica u otras fuentes de energía bajas en carbono.

Ya existe una infraestructura global establecida para la producción, el transporte y el uso de amoníaco a gran escala. Esto permite exportar amoníaco desde regiones ricas en energía a usuarios finales de todo el mundo. que luego puede “descomponerse” nuevamente en hidrógeno. Este es un elemento clave para reducir las emisiones de carbono industriales y la movilidad.

Esta nueva tecnología patentada de craqueo de amoníaco amplía la cartera de Air Liquide para la producción de hidrógeno renovable y con bajas emisiones de carbono. Como parte del exitoso desarrollo de esta unidad, se han desarrollado importantes innovaciones propias en varias áreas clave. Incluyendo la seguridad del proceso Pruebas de materiales Catálisis avanzada para el craqueo de amoníaco, quema de amoníaco y separación molecular eficiente El éxito de este proyecto demuestra la capacidad de Air Liquide para escalar la tecnología desde la investigación de laboratorio hasta las aplicaciones industriales. y desarrollar soluciones únicas para los clientes.

Armelle Levieux, miembro de la junta ejecutiva de Air Liquide, que supervisa las actividades de innovación y tecnología, así como las actividades de energía de hidrógeno, dijo: “La puesta en marcha de nuestra unidad piloto de craqueo de amoníaco en Amberes es un hito importante. Se trata de una primicia mundial que allana el camino para una nueva cadena de suministro de hidrógeno con bajas emisiones de carbono. Air Liquide demuestra su capacidad para innovar y proporcionar soluciones concretas a los clientes al demostrar la viabilidad del craqueo de amoníaco a escala industrial. Extremadamente orgulloso del trabajo y compromiso de todo el equipo que hizo posible este éxito”.

— Este contenido está patrocinado por aire liquido

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