La Asociación de Fútbol acusó al Crystal Palace de mala conducta después de que sus seguidores desplegaran una pancarta que mostraba al propietario del Nottingham Forest, Evangelos Marinakis, apuntando con una pistola a la cabeza del mediocampista Morgan Gibbs-White.

Una pancarta desplegada durante el empate 1-1 de la Premier League en Selhurst Park en agosto decía: “El señor Marinakis no está involucrado en chantaje, amaño de partidos, tráfico de drogas o corrupción”.

Marinakis ha negado sistemáticamente cualquier irregularidad en relación con tales acusaciones.

La FA acusó a Palace de no garantizar que los aficionados no se comportaran de manera inapropiada, ofensiva, abusiva o provocativa.

Fuente